En dos días más se cumplirán 90 años desde la primera aparición del ratón Mickey en Steam Boat Willie (18 de Noviembre de 1928) y tenía muchas ganas de celebrar su cumpleaños a mí manera: ¡la manera muñequil!

Aún no tengo suficiente espacio para andar armando dioramas, me hubiera encantado poder hacer una escena de fiesta con mis muñecas, pero aunque no logré hacer eso, resolví mi dilema de todas formas.

He estado planeando esta foto al menos una semana. Tenía la idea clara de que quería tomarla desde arriba y que pareciera una fiesta con temática Mickey. Me acordé que tenía una mini torta rosada con su silueta y una dona de Minnie que me regalaron hace mucho tiempo con una compra, así que me puse a planear.

Necesitaba gorritos de fiesta, ¡por supuesto! Una fiesta no es fiesta sin gorritos.

Luego de resuelto el asunto de los gorritos, era cosa de armar la escena. Necesitaba una superficie que funcionara como una mesa para la fiesta, ya que no planeaba mostrar nada más que la mesa, así que daba igual lo que fuese. Primero se me ocurrió papel con diseño, pero pensé que haría mucho ruido con todo encima. Luego pensé en usar papel de color, pero la verdad quería darle algo de textura. Considerando eso decidí sacar mis dos mesitas miniatura, son simples y tienen algo de textura encima.

Empecé súper simple. Los gorritos, una tetera roja de puntos blancos, y los dulces. Puse las flores en una esquina para que ocupara espacio y además se viera más colorido.

Y si se lo están preguntando: Sí, esa es mi cama, una tabla encima y las cositas miniatura. Puse la tela rosa de lunares abajo en caso que al final decidiera mostrar algo más que la mesa en la foto final.

Tomé algunas fotos con esta mesa, pero se veía muy simple, así que saqué la mesita número 2.

Ok, no se ve tan maravilloso tampoco, pero el plan era sacar parcialmente del encuadre algunos elementos para que pareciera que había más cosas alrededor. Pero aún no era suficientemente festivo.

¿Y qué es más festivo que el confetti? Así que hice confetti miniatura en los colores de Mickey.

¡Que locura como el confetti cambió todo!

El lente de mi cámara, por muy bueno que sea, no puede enfocar de súper cerca, así que tomé la foto de lejos para asegurarme que todo quedara enfocado. Total, luego se puede cortar.

Esta es la segunda foto que tomé de esta mesa. En la primera ya estaba editando cuando noté que las galletas de corazón no alcanzaban a salir dentro del encuadre. Por suerte aún tenía en mi cama todo dispuesto para re tomar la foto. Moví las galletitas y listo.

Y por supuesto, tuve que hacer algo de edición. ¡Me encanta como va quedando!

Así quedó luego de pasar por Lightroom. Me gustaba mucho, pero sentía que la dona estaba compitiendo con el pastel, así que decidí ir a Photoshop y desenfocar todo un poco, menos el pastel. Me dolió hacerlo porque me costó que todo quedara enfocado, pero creo que el resultado es mejor.